Representantes del sector privado manifestaron su conformidad con el manejo que hasta el momento el Gobierno viene realizando de la Hidrovía Paraguay-Paraná, aunque señalaron que hay expectativa por el llamado a licitación para la nueva concesión de la vía fluvial más importante del país.
Por Leandro Selén
“La sensación que da es que se manejan de manera seria. Están trabajando bien”, afirmó a Télam el director de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Julio Calzada, quien consideró que la Administración General de Puertos (AGP), a cargo de la Hidrovía desde septiembre del año pasado “ha dado una imagen de solvencia en el manejo”.
El economista de la BCR sostuvo que “el funcionamiento en líneas de generales es correcto”, y destacó que “no hay mayores cuestionamientos” al modo en que viene trabajando el órgano que preside José Beni.
En ese sentido, puntualizó que “los privados, como la Cámara de Puertos Comerciales, vienen trabajando en conjunto con la AGP y funciona”.
Calzada recordó que “la AGP ya venía trabajando el dragado y balizamiento en el Puerto Buenos Aires”, y subrayó que “hubo toda una experiencia ahí, donde el organismo abrió dos unidades de negocios “.
Por su parte, el presidente de la Bolsa rosarina, Miguel Simioni, consideró que está “bien” lo hecho hasta ahora por la AGP, y señaló a esta agencia que desde ese organismo “se está trabajando” en llamar a una nueva licitación.
“Lo califico bien lo hecho hasta ahora. Hay ansiedad cuando no se tiene una fecha cierta, pero sé que se está trabajando en eso”, indicó Simioni, quien remarcó que “la Bolsa viene trabajando en la cuestión de la Hidrovía casi desde su fundación y viene ayudando muchísimo en aspectos técnicos”.
El ejecutivo sostuvo que “se necesita una Hidrovía eficaz y moderna para que sirva a toda la producción del país”, y consideró que “es precisa una fecha más cierta del llamado a licitación”.
“Es comprensible que hubo algunas impugnaciones y contratiempos que se irán solucionando y ojalá que haya una fecha cierta próxima”, concluyó el titular de la BCR.
Por su lado, Guillermo Misiano, presidente del Grupo PTP, uno de los principales operadores portuarios del Paraná, también consideró que el manejo de la AGP “viene funcionando bien”.
“El sistema no se vio comprometido, sigue funcionando bien”, remarcó Misiano a Télam.
PTP tiene el manejo de terminales sobre la Hidrovía en las ciudades bonaerenses de San Nicolás, Ramallo y Lima, Nueva Palmira (Uruguay) y Villeta (Paraguay), y está en proceso de construir dos nuevos puertos: uno en la Zona Franca Santa Fe de Villa Constitución y el otro en Brasil.
“Las debilidades, quizás por tratarse de una situación transitoria y que no se está resolviendo el tema principal, pasan por lo que estamos viviendo con esta bajante histórica del río, de toda la cuenca, que por las limitaciones que se tienen en la reglamentación no le permiten a la AGP realizar mayores cotas del dragado”, indicó el empresario.
Evaluó que “ese es el punto débil que está teniendo“, pero puntualizó que “no obedece a una mala praxis o mala gestión de la AGP”.
“Todo lo contrario, es una cuestión natural que al tratarse de una administración provisoria tampoco tiene las herramientas legales como para poder hacerle frente a las contingencias que plantea la Hidrovía”, indicó Misiano, quien afirmó que “la gran cuenta pendiente aquí es resolver definitivamente la cuestión Hidrovía, ponernos a hablar definitivamente de cómo va a ser el nuevo gerenciamiento que va a tener, pensar en un plan a 20 o 30 años, saber con qué profundidad se va a trabajar, definir cuáles van a ser los canales de navegación. Es la vía por donde salen las exportaciones del país e ingresan las divisas”.
La Hidrovía transporta el 80% de la mercadería que exporta el país e ingresa el 95% de sus importaciones y a lo largo de sus 820 kilómetros operan 18 puertos que reciben por año carga transportada en 1.200.000 camiones y 250.000 vagones de tren.
Hace casi un año, el 30 de abril de 2021, venció la concesión que durante 26 años estuvo en manos de un grupo privado liderado por la empresa belga Jan de Nul.
Sin embargo, el Gobierno la extendió en un primer momento por 90 días, pero antes de cumplirse ese plazo, el 1 de julio, el presidente Alberto Fernández decidió dejar a la Hidrovía por 12 meses bajo control estatal a partir del 11 de setiembre, y otorgarle a la AGP la concesión de la operación para el mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado y redragado, y el correspondiente control hidrológico de la vía navegable troncal comprendida entre el kilómetro 1.238 del Río Paraná, punto denominado Confluencia, hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales en el Río de la Plata exterior.