El Puerto Santa Fe es uno de los principales motores de la economía de la ciudad y de la región

Tradicionalmente, los puertos han sido uno de los principales generadores de empleo en todo el mundo y el Puerto Santa Fe no es la excepción. Más aun en los últimos dos años con la creciente recuperación del ala productiva del puerto, primero en la Terminal Agrograneles y actualmente en la Terminal de Contenedores y Cargas Generales (TCCG), la actividad portuaria propiamente genera alrededor de 200 empleos creados por la actividad de la comunidad portuaria, entre empleos directos e indirectos.

En este momento hay 5 obras en ejecución a cargo del Ente Administrador Puerto Santa Fe, 3 en el área portuaria y 2 en la Ciudad-Puerto, que emplean unas 20 personas cada una. Estos son unos 100 puestos de trabajo que son generados de manera indirecta.

También, en los terrenos del Puerto Santa Fe, se están realizando unas 10 obras y construcciones de privados, empleando unas 300 personas. Además de los 60 emprendimientos radicados en la jurisdicción que de forma inducida emplean unas 500 personas más como mínimo. Más allá de que predomine uno u otro tipo de empleo, lo cierto es que estos puestos de trabajo se generan a partir de la fuente primaria, el Puerto Santa Fe.

El presidente del Ente Administrador Puerto de Santa Fe, Carlos Arece explicó que el movimiento del puerto está generando más puestos de trabajo «encontramos la escala de empresa pyme que podemos atender y dimos con los barcos que pueden entrar en los puertos, más aun con la altura del río. Estos son barcos de mediana envergadura, de 100 metros de eslora, de punta a punta. Cargan 2500 toneladas. Barcos mas grandes sería un problema» 

Carlos Arese, en una reciente entrevista para la Revista A Buen Puerto, habló sobre la recuperación de la actividad portuaria y las inversiones en infraestructura: “Surgieron un montón de necesidades, sobre todo necesidades de inversiones porque la infraestructura estaba bastante paralizada. Desde ese primer embarque de Julio cada diez días o cada quince, cada doce o cada semana, fuimos repitiendo embarques”