Carla Monrabal, Presidenta del Consejo Portuario Argentino (CPA), viajó al XXX Congreso Latinoamericano de Puertos que se realizó en el Blue Med Convention Center, con sede en la ciudad de Santos, Brasil.
El evento, que comenzó el lunes 28 – y que se extendió hasta el miércoles 30 de noviembre – es un espacio donde las figuras más importantes del sector exponen y debaten los proyectos actuales y futuros de la industria año tras año.
Monrabal, quien además es Presidenta del Consorcio de Gestión del Puerto de Dock Sud (CGPDS), tuvo la oportunidad de exponer sobre los principales asuntos que atañen a la entidad que dirige tales como: la innovación logística, la transformación digital y la igualdad de género, parte importante de las acciones sustentables que se han llevado a cabo según los estándares que demanda la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Además, fue una gran oportunidad para seguir cimentando los vínculos que unen a los puertos nacionales con los más importantes de América Latina y concretar acuerdos que ayuden a potenciar el país.
“Como presidenta del Consejo Portuario Argentino y del Puerto de Dock Sud es un honor poder participar de un nuevo Congreso Latinoamericano de Puertos”, confesó Carla Monrabal sobre el AAPA Latino. “Es un espacio propicio para presentarles nuestros proyectos. Intercambiar ideas y análisis. Dialogar sobre las realidades que vivimos como puertos argentinos y de la región”, aseveró.
Además, agregó que “buscamos conocer cada experiencia y desde allí abrir un camino conjunto, proponiendo la construcción de una visión integral, al igual que lo hicimos en el Consejo Portuario Argentino”.
El rol portuario en el nuevo paradigma post pandemia
Tras casi dos años de pandemia mundial, la conectividad de los puertos argentinos con el mundo en ese contexto, en conjunto con la articulación pública y privada, desempeñaron un rol fundamental para la llegada de insumos sanitarios y provisión de alimentos a gran escala. La era de la post pandemia expuso un paradigma distinto y una nueva realidad.
“Es importante tener presente que nuestra actividad se desarrolla en un mundo que aún no superó la pandemia”, estableció. El nuevo escenario convirtió a este congreso en una oportunidad primordial para seguir creciendo, siendo el sector portuario de vital importancia para el desarrollo nacional y mundial.
Además, expresó: “Los puertos propician el transporte de mercaderías por el mundo, por esta vía ingresan insumos y bienes de capital que multiplican la producción de cada país, añadiendo valor. También entra la energía que potencia las máquinas y mantiene alumbrado cada rincón de las ciudades”.
“Es una contribución estratégica que hacemos como centros logísticos de transporte. Un aporte fundamental al crecimiento industrial. Completamos una cadena que empieza en el campo, las minas, las grandes fábricas y las pymes del barrio o la ciudad”, explicó Monrabal, quien considera que trabajar en equipo posibilitará afianzar ese rol que cumplen los países como Argentina, que son proveedores de alimentos, materias primas y recursos naturales.
Algunos desafíos y la perspectiva de género
Carla Monrabal es la primera mujer en desempeñarse como Presidenta a cargo de un puerto bonaerense, además de ser la primera mujer en presidir el CPA, así que no es extraño que uno de sus puntos más fuertes sea la perspectiva de género en un ambiente donde la masculinidad ha predominado desde siempre.
“Resultó crucial la iniciativa de las trabajadoras portuarias, quienes crearon la Comisión de Perspectiva de Género y Diversidad del CGPDS”, admitió. “Realizamos relevamientos que más tarde nos permitieron reducir la brecha entre mujeres y hombres incrementando el número de trabajadoras”, resaltó Carla Monrabal, cuya gestión logró impulsar las políticas de género.
Otro de los factores fundamentales es la modernización con una óptica político ambiental. “En Argentina, la transición energética ya comenzó pero todavía hay un largo camino por recorrer, tenemos compromisos tomados a 2030 para lograr diversificar la matriz energética y lograr una verdadera transición”.
Por último, preservar la comunidad es imperativo para Monrabal: “Los puertos no pueden ser ajenos a la comunidad que los rodea. Los puertos verdaderamente eficientes, son los que tienen presentes las necesidades de sus vecinos y vecinas, solo trabajando en conjunto se puede lograr una sinergia perfecta”.
