La actividad comercial en el Puerto de Montevideo se encuentra en una situación crítica, con aproximadamente 9,000 contenedores paraguayos retenidos debido a paros laborales. Esta interrupción ha generado consecuencias significativas para el comercio internacional y en particular para Paraguay.
El conflicto tiene su origen en las negociaciones salariales entre el Sindicato Único Portuario y Ramas Afines (Supra) y el Centro de Navegación. Estos paros han afectado la operativa de la terminal portuaria desde agosto, con pérdidas diarias que superan los 200,000 dólares.
Un total de 58 gremiales industriales y de comercio exterior de Paraguay, incluyendo el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos de Paraguay (Cafym) y la Cámara Paraguaya de la Carne, han expresado su preocupación por la situación.
Los contenedores varados, que utilizan el Puerto de Montevideo como terminal de tránsito por un acuerdo con la Administración Nacional de Puertos (ANP), incluyen 5,000 destinados a la exportación de materias primas y 4,000 de importación con productos variados.
La situación actual involucra 13 embarcaciones inmovilizadas, con riesgos de afectar gravemente los productos, especialmente aquellos que requieren tratamientos específicos. Las demoras han alcanzado picos de hasta 14 días, lo que agrava aún más la crisis.
Ante esta problemática, las gremiales paraguayas han hecho un llamado al gobierno uruguayo, trabajadores portuarios, sindicatos y entidades involucradas para establecer un diálogo urgente. El objetivo es articular soluciones a corto plazo que permitan restablecer la fluidez del comercio internacional y recuperar la confianza en Montevideo como un hub regional de transbordo.
La continuidad de este conflicto no solo afecta a Paraguay sino que también pone en riesgo la reputación y eficiencia del Puerto de Montevideo como un centro logístico clave en la región.