El intendente de Coronel Rosales, Rodrigo Aristimuño, expresó su preocupación por el reciente derrame de petróleo en la ría, originado durante una maniobra de amarre de un buque en la empresa Oiltanking, con sede en su partido. Aristimuño señaló que la empresa falló en la comunicación hacia la sociedad y destacó la importancia de asumir la responsabilidad social, especialmente cuando hay una comunidad que convive con la ría.
Aristimuño afirmó que, en su opinión personal, hubiera preferido una acción inmediata ante la situación. Destacó que la comunidad está sumamente preocupada, y aunque la situación se minimizó inicialmente, ha tenido un impacto significativo.
La empresa Oiltanking activó el Plan de Contingencias para Derrames de Hidrocarburos en el Agua (PLANACON) y comenzó las labores de remediación y limpieza del área afectada en el canal del embudo y sus alrededores. El intendente mencionó que tanto la Prefectura Naval Argentina como el Consorcio de Gestión del Puerto llevarán a cabo sumarios para determinar las responsabilidades y tomar medidas sancionatorias.
Aristimuño subrayó la importancia de entender por qué ocurrió el incidente y si la empresa actuó según los procedimientos establecidos. Señaló que el PLANACON, presentado ante la autoridad marítima y revalidado cada cinco años, establece procedimientos específicos, y el sumario administrativo determinará si se cumplieron.
El intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, había mencionado previamente que la activación oportuna del PLANACON podría haber evitado impactos ambientales graves. Aristimuño informó que se espera la llegada de expertos internacionales en remediación ambiental para abordar la situación de manera inmediata y minimizar el impacto.
Finalmente, Aristimuño insistió en que la empresa debe asumir todos los costos asociados con el incidente, incluyendo multas impuestas por las autoridades ambientales, el Consorcio de Gestión del Puerto, y la Prefectura. Además, enfatizó la necesidad de maximizar las medidas de seguridad.