Miguel Donadío, ex presidente del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, en una reciente entrevista concedida a Radio Urbana, expresó su descontento con la decisión de YPF de seleccionar a Punta Colorada, en Río Negro, como el emplazamiento de la nueva planta de GNL.
Donadío, quien lideró el Consorcio portuario entre 2017 y 2019, manifestó que la elección fue motivada por intereses políticos más que por consideraciones técnicas. El expresidente del Consorcio recordó que, bajo su gestión, se inició el trabajo en Bahía Blanca para posicionarse como el sitio ideal para este proyecto de infraestructura crítica. “Desde ese momento y en esa gestión ya se empezó a trabajar este tema que entendimos como esencial para la ciudad. Comenzaron allí las tratativas, se empezó con la evaluación tanto del sitio como del proyecto”, afirmó Donadío.
Miguel Donadío, ex presidente del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, Aseguró que en 2019 no se evaluaba a Punta Colorada como una opción viable.
La inversión para construir la planta de GNL es considerada la más grande en la historia de Argentina, prometiendo mejorar significativamente la capacidad exportadora del país. Durante casi una década, Bahía Blanca fue vista como la localización estratégica para esta inversión, con preparativos como la reserva de tierras en 2022.
Además de lamentar la elección de Punta Colorada, Donadío destacó el potencial del Puerto de Bahía Blanca para otros desarrollos industriales. “El Puerto de Bahía Blanca tiene una impronta muy poderosa para desarrollar otros proyectos como el de Profertil. Más allá del GNL, el puerto tiene múltiples visiones estratégicas que se llevarán adelante los próximos años”, declaró.
El ex funcionario señaló que la decisión de YPF fue una movida política, influenciada por la habilidad de los gobernadores de Neuquén y Río Negro. “Cualquier argumentación que llega después sirve para intentar fundamentar algo estrictamente político“, aseguró Donadío. Sin embargo, reconoció la importancia de la inversión para el país, valorada en 30 mil millones de dólares, a pesar de no ser el destino deseado para Bahía Blanca.
Donadío enfatizó la necesidad de implementar políticas de Estado coherentes y sostenidas en el tiempo para asegurar el desarrollo nacional. “Hay que tener políticas de Estado, no de Gobierno, si no será imposible que el país avance“, concluyó.
En cuanto a Punta Colorada, el sitio elegido para la planta de GNL, es una pequeña localidad en el Golfo San Matías, que tuvo su auge en 1977 con la operación de una mina de hierro, cerrada en 1992. Con una población de solo cuatro personas según el último censo, Punta Colorada ofrece un puerto con dos muelles de atraque y una capacidad de carga de hasta 2000 MT por hora de pellets de hierro.