En la tarde de ayer llegaron a un acuerdo en la modalidad de acreditarse y las partes firmaron un acta en la sede del Ministerio de Trabajo de la Nación.
La modalidad en el pago de un bono extraordinario que los trabajadores aceiteros acordaron acreditar en sus haberes llevó a diferentes interpretaciones entre empresario y sindicato. A tal extremo que el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) del departamento San Lorenzo había anticipado por reiniciar un huelga que durante diciembre hizo que la producción se paralizara por casi veinte días.
La organización obrera expuso que el empresariado no quería cumplir lo pactado y los industriales esgrimieron que cumplieron con todo lo suscripto.
Poco antes de terminar el año se firmó un acta por un aumento salarial y el pago de ese bono “pandemia”, que consideraba un pus para aquellos que prestaron servicios durante la cuarentena impuesta por el gobierno en prevención a los contagios de coronavirus.
El párrafo en cuestión señalaba que, para el caso de los trabajadores con jornada reducida o que hayan ingresado con posterioridad al 19 de marzo de 2020 (fecha en la que comenzó a regir la cuarentena), dicha suma “será liquidada en forma proporcional”.
Algunas compañías aceiteras procedieron a liquidar la primera cuota de ese bono de manera proporcional a los días efectivamente trabajados en el período de aislamiento obligatorio, mientras que los gremialistas entendían que el texto hacía referencia a los meses en cuestión.
Como ejemplo, aquellos que prestaron servicios durante tres o cuatro meses, entonces deberían recibir un bono proporcional. Si lo acordado fue de 90.000 pesos por todo el período de cuarentena, el que trabajó tres o cuatro meses debía acreditar 30.000 o 40,000 pesos, pero sin descuento alguno por ausentismo.
Finalmente se convino una forma de pago y el anunciado paro general quedó descartado.
Las negociaciones habían comenzado el miércoles en sede del Ministerio de Trabajo de la Nación y culminaron ayer en el mismo sitio. Fuente: SL24