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El 15 de octubre, destacados investigadores y comunidades civiles de Brasil presentaron un reclamo formal ante la Presidencia de la República, el Palacio Itamaraty y el Ministerio de Medio Ambiente brasileño.

La denuncia, de acuerdo a los especialistas, apunta a los graves impactos ambientales que podrían desencadenarse en el Bioma Pantanal debido al dragado extremo y la remoción de rocas del lecho del río, en un contexto de sequía extraordinaria.

En la denuncia se especifica que el conflicto se centra en las obras de dragado iniciadas de manera unilateral por la empresa LHG Mining, del grupo JBS, en el tramo paraguayo de la hidrovía, sin respetar lo establecido en el Tratado de la Hidrovía.

En una situación de escasez hídrica excepcional, el derrocamiento y dragado no pueden considerarse soluciones viables, ya que amenazan el Bioma Pantanal y su frágil Sistema de Humedales”, advierte la carta dirigida a las autoridades.

El Bioma Pantanal, declarado Patrimonio Nacional por la Constitución de Brasil, conlleva obligaciones claras de protección y preservación por parte del poder público. En la misiva se citan también investigaciones que demuestran las serias consecuencias que estas obras podrían generar.

Los científicos destacan que la propuesta paraguaya tendría un impacto significativo en el régimen de inundaciones del Pantanal, provocando un caudal acelerado, mayores picos de descarga y una reducción de las áreas inundadas.

Las consecuencias ambientales, sociales y económicas, derivadas de los impactos hidrológicos, geomorfológicos y ecológicos, pondrán en grave riesgo al Bioma Pantanal”, afirman los autores del documento.

Además, la carta denuncia que “ignorar la evidencia técnica multidisciplinaria para avanzar en proyectos puramente económicos constituye un acto de negacionismo científico”.

De acuerdo a lo informado, el reclamo también coincide con las críticas de varios expertos locales, quienes cuestionan la falta de idoneidad en la gestión de un proyecto de tal envergadura y sensibilidad ambiental