En el marco de la discusión sobre el cobro de peaje en el tramo norte de la estratégica Hidrovía Paraguay-Paraná, los medios paraguayos resaltan que la situación actual ha creado un escenario único donde, a pesar de la emisión de facturas por parte de Argentina, no existe un mecanismo activo de cobro.
Acorde con el artículo 9º del acuerdo de Santa Cruz de la Sierra, los países de la Cuenca del Río de la Plata, Uruguay, Brasil, Bolivia y Paraguay, reconocen la importancia de un peaje que refleje las obras realizadas y los beneficios para la navegación. Por su parte las autoridades argentinas argumentan que el peaje busca asegurar la remuneración por las inversiones y el mantenimiento necesarios en la hidrovía.
“El cobro del peaje es legítimo siempre y cuando las obras hayan sido efectivamente ejecutadas y contribuyan a la navegación”, afirma Julio Vera presidente de la Administración Nacional de Navegación y Puertos de Paraguay (ANNP).
Sin embargo, Vera, señaló que, a pesar de la no implementación de un proceso activo de cobro, Argentina continúa emitiendo facturas. “Argentina persiste en la emisión de facturas de peaje, lo que, aunque no se busque un cobro activo, genera una deuda que refleja el uso de la hidrovía”.
Desde la ANNP señalan que esta situación ha generado cierta incertidumbre entre los actores involucrados en el transporte fluvial. Los armadores y las autoridades paraguayas se enfrentan a la tarea de decidir cómo manejar esta acumulación de deudas, lo que podría derivar en futuras instancias judiciales para clarificar y asegurar la equidad en el cobro de peajes.
La Comisión Técnica del Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH), actualmente liderada por Uruguay y coordinada por Brasil, es la que asumió la mediación en este asunto.
El año pasado se realizaron reuniones en Montevideo y Buenos Aires para buscar acuerdos y se hicieron visitas in situ una en una embarcación de la Prefectura Naval Argentina y las otras en un convoy de barcazas, para verificar de manera más real las condiciones de navegación por la vía fluvial.
Mientras aún no ha sido confirmada una tercera reunión técnica entre los países involucrados para alcanzar un acuerdo definitivo, la discusión por el cobro del peaje en el tramo norte de la hidrovía continúa en un impase.