Eco Delta 1, la pionera embarcación eléctrica, se convierte en un ejemplo brillante de innovación y compromiso ambiental, realizando su primer recorrido con éxito por los canales del Delta del Paraná. Esta embarcación, con capacidad para 22 pasajeros, opera con un motor eléctrico, abandonando los combustibles convencionales y utilizando paneles solares para autoabastecimiento energético.
Esta iniciativa, liderada por Leonel Falcón, presidente de Delta Argentina Uruguay SA, en colaboración con el astillero Unidelta y el fabricante de motores eléctricos Naval Electric, marca un precedente en el impulso de tecnologías más limpias y eficientes para el transporte fluvial.
El Eco Delta 1 no sólo es un avance tecnológico, sino también un compromiso con el medio ambiente, reduciendo significativamente el ruido, la contaminación ambiental, y los riesgos de derrames de combustibles en los cuerpos de agua.
Falcón comenta: “Nuestro objetivo con esta primera ecolancha es demostrar la funcionalidad del prototipo para, posteriormente, transformar nuestra flota hacia embarcaciones eléctricas, más sustentables y con menos necesidades de mantenimiento”.
La embarcación mantiene la estética tradicional de las lanchas-colectivo del Tigre, pero su construcción de aluminio, en lugar de madera, la hace más liviana y con una navegación más eficiente. Ya se vislumbran proyectos futuros, incluyendo una embarcación más grande para 64 pasajeros y un catamarán para paseos turísticos operando bajo los mismos principios ecológicos y eficientes.
Delta Argentina Uruguay SA, con una operación de 160 embarcaciones y 58 recorridos diferentes, se compromete a preservar el entorno único del Delta del Paraná, reconocido por su impresionante biodiversidad y singularidad geográfica. “Es imperativo preservar nuestro Delta. Adoptar la movilidad eléctrica, minimizando la contaminación y el ruido, es un paso vital para lograrlo”, enfatiza Falcón.
El ambicioso proyecto Ecolancha, presentado a la provincia de Buenos Aires, proyecta la construcción de 174 unidades con una inversión de $90.000 millones, y la creación de más de 1.000 empleos, impulsando así la industria naval, el turismo, y contribuyendo significativamente al desarrollo sostenible local.
Con un enfoque hacia la reducción de emisiones de GEI a cero, el proyecto no sólo contempla la utilización de energías renovables, sino también la compensación de las emisiones restantes a través de la adquisición de bonos de carbono, financiando proyectos de forestación y preservación de humedales.
Con información de Profesional
