Finalizó la 118º Campaña Antártica de Verano (CAV) 2021/2022, en la cual durante 236 días se llevaron a cabo tareas de abastecimiento de todas las bases argentinas en el continente blanco, el traslado y relevo de personal militar, civil y científico y el repliegue de residuos.
La ceremonia de finalización estuvo encabezada por el ministro de Defensa, Jorge Taiana, que enumeró las diversas tareas emprendidas por el personal civil y militar involucrado en la última campaña antártica.
“Quiero felicitar a todos los que participaron de esta Campaña porque luego de dos años difíciles y de contracción debido a la pandemia, se pudo recuperar ese tiempo postergado; han dado muestra de una capacidad profesional y un esfuerzo extraordinario. Cumplieron con el objetivo de relevar a las dotaciones que habían invernado largamente por la pandemia en la Antártida” subrayó el ministro de Defensa
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Asimismo, Taiana destacó “la importancia de haber recuperado las clases en la única escuela antártica ubicada en la base Esperanza; poner los cimientos para el funcionamiento de las antenas de los satélites de la CONAE; y avanzar en la recuperación de la base Petrel como base permanente”.
Al finalizar sus palabras, el titular de la cartera anticipó que ya se está trabajando en la planificación de la próxima Campaña Antártica de Verano 2022-2023, “en la cual tenemos muchos objetivos para seguir fortaleciendo la presencia argentina en el continente blanco donde tenemos permanencia ininterrumpida desde el año 1904”.
A su turno, el comandante Conjunto Antártico, general de Brigada Edgar Calandín, aseguró que “el balance de la Campaña es positivo y superamos las expectativas”, al tiempo que remarcó algunos de logros alcanzados, dentro de los cuales mencionó también “la reapertura de la base Petrel que constituye no solo el anhelo de los viejos antárticos, sino además una nueva visión integradora entre los civiles y militares que conforman el Sistema Antártico Argentino, y nos permitirá incrementar nuestras capacidades, un mejor ejercicio soberano, el ensanchamiento de proyectos científicos y materializar un centro científico y logístico multimodal que concrete la unión bicontinental argentina”.
El General Calandín, precisó que se ejecutó el Plan de evacuación de residuos históricos “con un nuevo récord en la extracción, y utilizando a Ushuaia como prestadora de servicios para su recepción”. Allí explicó también que se ejecutó y finalizó “el Plan Satelital de la Defensa, con todas las bases permanentes integradas”
El desarrollo de la Campaña Antártica de Verano es parte de la política de fortalecimiento de la presencia antártica para resguardar la soberanía y los intereses de nuestro país en ese continente.
La 118° CAV 2021/2022 se inició oficialmente el 11 de enero con la zarpada del Rompehielos ARA “Almirante Irízar” hacia el continente blanco.
Bajo la dirección del Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR), dependiente del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, se cumplió eficazmente con el objetivo de realizar todas las acciones de abastecimiento de las bases argentinas y brindar el apoyo logístico a las actividades científicas que desarrolla nuestro país en la Antártida.
El periplo del rompehielos ARA “Almirante Irizar” estuvo dividido en tres etapas que permitió el aprovisionamiento y relevo de dotaciones de todas las bases que la República Argentina mantiene operativas: siete permanentes (Esperanza, Marambio, San Martín, Orcadas, Carlini, Belgrano II y la recientemente abierta, Petrel); y las transitorias Decepción y Primavera.
Previamente, al personal involucrado en esta campaña se le requirió el esquema de vacunación completo y fue sometido al aislamiento obligatorio de no menos de 14 días con la prueba de dos test PCR uno al ingresar y otro en el día 14, como también un test de antígeno para habilitar la incorporación a la burbuja sanitaria.
En esta nueva edición participaron 1065 personas, entre personal militar, científico y 14 menores de edad que forman parte de la invernada familiar de la dotación de la base Esperanza, donde se procedió a la reapertura de la Escuela “Presidente Dr. Raúl Ricardo Alfonsín”.
El relevo de las dotaciones y el reabastecimiento con víveres, combustibles e insumos de todas las bases nacionales incluyó el repliegue de residuos históricos en el marco del Plan 2020/24, que a la fecha ascendió a 241 toneladas. Además, entre la carga general y frigorizada (víveres, e insumos varios) se sumaron 3.130 m3 de combustible (gas oil antártico) y 996 tambores de lubricantes.
Esta campaña implicó 236 días de operaciones ininterrumpidas de unidades terrestres, navales y aéreas, que incluyeron más de 600 horas de vuelo de los distintos Sistemas de Armas Aéreos y más de 47.000 millas navegadas por las unidades navales en 138 días. Esto posibilitó el despliegue de 206 científicos y técnicos entre las bases permanentes y las 4 temporarias abiertas.
Asimismo, se puso en marcha el proyecto de transformar a la base Petrel en permanente con el objetivo de consolidar un polo logístico antártico que convierta a la Argentina en una puerta de ingreso al continente blanco materializado en los Polos Logísticos Ushuaia y Petrel.
La primera etapa consistió en la recuperación de capacidades habitacionales de Petrel, de su casa principal y de emergencia y del hangar; además de realizar estudios de impacto ambiental y de factibilidad de construcción de un muelle y pistas.
Durante estos meses de trabajo, se dió continuidad al apoyo logístico de todas las actividades científicas nacionales e internacionales; así como también se avanzará con el Servicio de Hidrografía Naval en la recuperación del balizamiento para ayudar a la navegación.
Estuvieron presentes las secretarias de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa, Daniela Castro; de Coordinación Militar en Emergencias, Inés Barboza Belistri; el secretario de Asuntos Internacionales para la Defensa, Francisco Cafiero; el jefe de Gabinete del Ministerio, Héctor Mazzei; la subsecretaria de Planeamiento Operativo y Servicio Logístico de la Defensa, Lucía Kersul; el subsecretario de Asuntos Internacionales, Roberto De Luise; los presidentes de TANDANOR, Miguel Tudino; y de CITEDEF, Pablo Bolcatto; el director del Instituto Antártico Argentino, Walter Mac Cormack; junto a representantes de la Embajada de Finlandia y de la empresa Aker Artic.
También participaron los jefes del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, teniente general Juan Martín Paleo; de la Fuerza Aérea, brigadier General Xavier Julián Isaac; de la Armada, almirante Julio Horacio Guardia; y del Ejército, general de División Guillermo Olegario Pereda.
Capacidades navales y aéreas
Se emplearon además del ARA “Almirante Irízar” -el único buque con capacidades de rompehielos y de investigación científica, tecnológica y logística de la región- otras tres unidades navales: el aviso ARA “Puerto Argentino”, que inició su campaña el 4 de enero, el transporte ARA “Canal Beagle” y el aviso ARA “Bahía Agradable”, el cual cumplió también funciones en la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) con la Marina de Chile.
Entre los medios aéreos fueron desplegados dos helicópteros pesados Sea King embarcados en el rompehielos, dos helicópteros Bell con asiento en Marambio, dos Hércules C-130 para el desarrollo de las líneas antárticas logísticas aéreas, y un Boeing 737 para despliegue y repliegue de personal y material desde el puerto de Ushuaia.