Globalports
El entramado global de cables submarinos no solo conecta continentes y países, sino que también desempeña un papel crítico en la economía y logística de naciones como Argentina.
Este sistema sostiene las comunicaciones internacionales, el comercio digital, y tiene un impacto directo en la navegación y la logística marítima, fundamentales para la integración del país en los mercados globales.
La importancia de estos cables quedó en evidencia en febrero de 2024, cuando un ancla de barco cortó varios cables estratégicos en el Mar Rojo, afectando a un cuarto del tráfico de Internet entre Europa y Asia.
Este incidente no solo alteró la conectividad, sino que también destacó las amenazas potenciales, tanto accidentales como deliberadas, en el contexto de tensiones geopolíticas entre potencias como Estados Unidos, China y Rusia. Un atentado bien organizado contra estas líneas podría paralizar la economía mundial en cuestión de segundos, desencadenando un caos geopolítico sin precedentes.
Argentina está conectada al sistema global de cables submarinos a través de puertos estratégicos como Las Toninas, un importante nodo que enlaza el país con América del Norte, Europa y otros mercados clave. Estas conexiones permiten:
- La transmisión de datos esenciales para la actividad comercial y financiera.
- La comunicación entre sistemas portuarios, optimizando la logística marítima.
- La gestión de operaciones críticas en sectores como la pesca, la exportación de productos agrícolas y la industria energética.
Proyectos como el cable Curie, que conecta Chile, Panamá y Estados Unidos, o el futuro cable Humboldt, que enlazará Chile con la Polinesia Francesa, abren nuevas oportunidades para Argentina, ya que podrían extender la red hacia el sur del continente. Esto no solo mejoraría la capacidad de comunicación, sino que también facilitaría el comercio y reforzaría la posición estratégica del país en la región.
El mapa interactivo de cables submarinos, desarrollado por TeleGeography, es una herramienta en línea que permite visualizar la extensa red de cables de fibra óptica que conectan los continentes bajo los océanos.
Repercusiones para la logística y la navegación
La logística marítima argentina depende de una conectividad robusta para coordinar la exportación de productos como soja, carne, vino y minerales. La infraestructura de cables submarinos permite gestionar eficientemente:
- Operaciones Portuarias: Los sistemas de gestión portuaria necesitan una conexión confiable para coordinar cargas y descargas, programar arribos y salidas, y garantizar la seguridad en los puertos.
- Seguimiento de Cargas: Las plataformas digitales de seguimiento dependen de datos en tiempo real para ofrecer transparencia y optimizar rutas.
- Comercio Exterior: La conectividad influye en la rapidez y fiabilidad de las transacciones electrónicas, esenciales para los contratos internacionales.
Los cables submarinos no solo sostienen la comunicación cotidiana, sino que también permiten transacciones económicas masivas —estimadas en más de 10 mil millones de dólares diarios solo en Estados Unidos—, además de comunicaciones de defensa y transmisiones cifradas.
Para Argentina, participar en iniciativas internacionales sobre conectividad submarina, así como invertir en infraestructura de comunicaciones, es clave para garantizar su integración económica y logística global. Conectar nuevos nodos de cable a puertos estratégicos y colaborar en proyectos de investigación regionales sería un paso esencial para robustecer su red y mitigar riesgos futuros.
La red submarina no es solo una infraestructura tecnológica; es el puente que conecta a Argentina con el resto del mundo, y su protección e innovación son vitales para el desarrollo sostenible del país.
