La Asociación Internacional de Estibadores (ILA, por sus siglas en inglés) anunció un acuerdo tentativo con el grupo de gestión que representa a las líneas navieras, operadores de terminales y autoridades portuarias, poniendo fin a la huelga de sus trabajadores en puertos desde Maine hasta Texas.

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Los trabajadores regresarán a sus puestos el viernes, tras la suspensión de actividades que había paralizado el flujo de la mayoría de importaciones y exportaciones en Estados Unidos.

El sindicato y la Alianza Marítima de los Estados Unidos (USMX), que representa a las empresas portuarias, han acordado una extensión del contrato que venció a finales del lunes. Este acuerdo provisional, que se mantendrá vigente hasta el 15 de enero, permitirá a los miembros del sindicato volver al trabajo mientras se finalizan los detalles de un contrato completo que requerirá ratificación de la base sindical.

Durante la huelga, 50.000 trabajadores dejaron de operar en los puertos, lo que impactó considerablemente el comercio internacional, con embarcaciones varadas en el mar sin poder cargar ni descargar mercancías.

La reanudación de actividades este viernes aliviará las interrupciones logísticas y permitirá que las empresas estadounidenses retomen sus exportaciones y distribución en mercados globales.

Aunque el acuerdo tentativo representa un avance hacia la estabilidad en la cadena de suministro, su implementación final dependerá de la ratificación por parte de los miembros de la ILA. La reciente negativa de la Asociación Internacional de Maquinistas (IAM) a un acuerdo con Boeing subraya la posibilidad de que la base sindical rechace el acuerdo, en cuyo caso las negociaciones deberán continuar.

Este desarrollo marca un avance positivo para los sectores económicos de importación y exportación en EE.UU., ofreciendo una ventana de estabilidad temporal mientras ambas partes trabajan para un acuerdo definitivo.