193 Aniversario de la ciudad de Bahía Blanca . Para el presidente del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, a la terminal y a la ciudad las une el destino desde sus propias creaciones.
Otro aniversario de Bahía Blanca. Y cada vez más cerca del bicentenario. ¿Cuál es el espíritu de Federico E. Susbielles, titular del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca? Que los actores involucrados estén en la misma página.
“Dependerá del aporte de todos. Por eso debemos tener una agenda en común para sumar las potencialidades y las capacidades de gestión de las organizaciones del Estado, de los privados y del sector académico. Debemos traccionar y generar esa ciudad en la que todos queremos vivir. Ya es momento de hacer realidad la expectativa que tenemos hace décadas”.
Susbielles también dijo que hay trabajar para que las inversiones que lleguen en el futuro sean las que se multipliquen en Bahía Blanca.
“Tenemos una oportunidad nueva, de cara al bicentenario, para que la ciudad pueda concretar sus potencialidades”, sostuvo Susbielles.
“El puerto debe tener una visión de acompañar el crecimiento y la formación de empresas especializadas en materia de servicios del sector, para un mayor acceso a mano de obra local. Hay que trabajar junto a esas compañías y al municipio en mejoras para los niveles de acceso a la salud, a la educación y a la cultura”, añadió.
—¿En qué realidad encuentra al puerto el 193 aniversario de Bahía Blanca?
—En un gran momento. Es una entidad madura que ha logrado trabajar, en estos años, en la construcción de equilibrios y de consensos entre todos los sectores que lo conforman para así avanzar y proyectarse.
“En un año tan especial como el de la pandemia no sólo se ha cumplido con el primer deber que se planteó la entidad, que era mantenerse operativa y apalancar la economía local, regional y nacional y mantener las fuentes laborales, sino que cuidó la salud de los trabajadores y trabajadoras y, fundamentalmente, se prepara para las inversiones en infraestructura necesarias. Este año generaremos una cantidad de obras portuarias como hace muchos años no se veían, y siempre con la visión de incluir a la comunidad en el proyecto.
—¿Hacia dónde va Bahía Blanca?
—El puerto y Bahía Blanca están unidos en el destino desde la creación de ambos puntos: la ciudad y el puerto; el puerto y la ciudad.
“El puerto no es sólo la puerta de entrada, sino la puerta de llegada de muchas inversiones, donde hay que trabajar en función del desarrollo de la ciudad con el municipio y los gobiernos provincial y nacional. Están dadas las condiciones.
“Tenemos todo para ser el puerto futuro de la Argentina: por las condiciones geográficas; por los nodos energéticos y por ser el sitio de salida de Vaca Muerta. Este hub logístico debe irradiar desarrollo armónico y sustentable.
“También hay que entender a la ciudad como un enclave académico por la gran cantidad de científicos que trabajan aquí. Debemos generar las condiciones para transferir ese conocimiento hacia mejoras en el pensamiento y en la planificación. En este sentido de innovación tecnológica, Bahía Blanca tiene un lugar importante en el mapa”.
—¿Cómo es la interrelación con las comunidades de Ingeniero White y de Bahía Blanca?
—Trabajamos de manera intensa. Entendemos que estamos en deuda en este sentido y el crecimiento ha sido asimétrico. El puerto es una locomotora que debe enganchar a la comunidad.
“Para este año tenemos obras interesantes en el puerto, pero también en el hospitalito de Ingeniero White, que dejará a la localidad con la comodidad y modernidad que merece. También una mejora en todos los espacios verdes, muy especialmente en la plaza del boulevard (Juan B. Justo) y El Saladero; y mejoras de luminarias, tanto en el puerto como en zonas adyacentes.
“También seguimos trabajando en los programas culturales. El año pasado fue muy bien recepcionado y entendemos que debemos acompañar ese desarrollo de riqueza cultural.
“Estamos convencidos de que el puerto que viene tiene que ser equilibrado. Y ese equilibrio tiene que reflejarse en que la comunidad viva mejor”.
—Si al puerto le va bien, a Bahía Blanca le va bien. ¿Esa es una frase de cabecera?
—Ese tiene que ser el norte, y para que se vivencie. Por eso hemos propuesto la feria del puerto, para que la gente se congregue y disfrute de otra manera la revinculación con el estuario y con el puerto.
“También estamos trabajando en un programa de ecoturismo. Lo presentaremos próximamente para que, una vez pasada la pandemia, podamos disfrutar de un lugar que nos caracteriza y que la mayoría de nuestras familias no conoce.
“El puerto necesariamente debe tener una mirada en este sentido, porque la licencia social que genera la debe trabajar de cara a la comunidad. Entendemos que el desarrollo portuario debe darse en armonía y en espejo con el desarrollo de la comunidad”.
La pandemia y los planes de inversión futuros
—¿Cómo trabaja el puerto en pandemia por el coronavirus?
—Desde el inicio se ha trabajado proactivamente y de manera muy dinámica, entendiendo que la prioridad para mantener el servicio esencial era cuidar la salud de los trabajadores y de las trabajadoras de este ámbito.
“Desde ahí, el puerto ha fijado un norte en materia de protocolos de prevención sanitaria y de seguridad, desde las que fueron inicialmente las restricciones de circulación para las tripulaciones; la generación de la unidad propia de cuidados mínimos en Puerto Galván; la implementación de un protocolo de transporte terrestre, que permitió que más de 200.000 camiones circulen por nuestra área sin contagios; la instalación de postas sanitizantes; sistemas propios de seguimiento epidemiológico; una posta sanitaria en el puerto y controles, con médicos a bordo, para aquellos buques que venían con menos de 14 días de navegación.
“Seguimos entendiendo que, empezando a transitar la segunda ola, la lógica es la misma. El puerto tiene una mesa de trabajo integrada por representantes de gremios, empresas y de Prefectura, en la cual se debate el día a día.
“Más allá de la pandemia, mostramos a un puerto que está a la vanguardia y que incorpora tecnología y adelantos científicos para asegurar la operatoria”, afirmó Susbielles.
“En ese sentido, estamos próximos a anunciar una nueva batería de medidas, que pondrá al puerto liderando la cuestión sanitaria. Lo hacemos porque buscamos la excelencia operativa y tenemos que seguir destacándonos como un faro a nivel nacional, más allá de la pandemia”.
—¿Cuáles son las próximas inversiones?
—Se han tomado decisiones importantes. Para este año tenemos un presupuesto orientado a revalorizar la instalación portuaria.
“Próximamente se llamará a licitación para una puesta en valor de la posta de inflamables. La idea es sumar obras para una vida útil de, por lo menos, 40 años.
“Luego de esta inversión integral, que también contempla una modernización del equipamiento en general, desde las grúas hasta un escáner que llegará en los próximos 60 días, que forma parte de un esquema tecnológico importante con el objetivo de ser un puerto inteligente en materia de seguridad.
“También se reacondicionará el muelle de pescadores, que generará mejores condiciones para la pesca artesanal y que repercutirá en nuestro paseo costero. Y el muelle de elevadores, que es una obra importante porque se recuperará un ámbito que quedará al servicio de la comunidad.
“También pretendemos que el puerto vuelva a recibir a la familia de la ciudad y de la región, al sumar un espacio de atracción turística”.
—¿La visión estratégica es también observada desde la Provincia y desde la Nación?
—Definitivamente. Tanto el gobernador Axel Kicillof, como el presidente Alberto Fernández, han fijado la importancia que tiene Bahía Blanca y así lo reafirman en gestiones que se vienen concretando.
“El ministro (de Transporte de la Nación, Mario) Meoni ha anunciado el acuerdo con el gobierno chino para la obra del tren norpatagónico y la idea es llamar a licitación antes de este diciembre. A esto se suma la mejora del ramal a Rosario, que mejorará nuestro hinterland, la conectividad ferroviaria y la capacidad de captar granos por fuera de los límites de la actualidad.
“También es importante la continuidad de la construcción de la autopista de la ruta 33; de la circunvalación y del Paso Urbano, que es un anillo vial necesario para que la ciudad y el puerto sean competitivos y generen una matriz de crecimiento.
“Por eso insisto: este es un año de mucho trabajo puertas adentro, y de puertas afuera, para terminar de traccionar las inversiones que el puerto necesita”.
Fuente: La Nueva, Fotos: Rodrigo García, Pablo Presti y Emmanuel Briane- La Nueva.